Casas Sanas: buenas para tu salud y el medio ambiente
Las casas sanas, son aquellas que utilizan estrategias de diseño bioclimático y usan materiales naturales en su proceso de construcción, respetando así la salud de las personas y el medioambiente.
Las casas ecológicas son cada vez mas populares, alejándose de esa idea de ser “un producto de lujo” y pasando a ser una necesidad fundamental, de primer orden, para cuidar la salud de las personas y del medioambiente. La Bioconstrucción es realizar una construcción consciente en la que se tiene en cuenta a la persona, al entorno y lo construido.
Las reglas de la Bioconstrucción es un catalogo de pautas para que las tengas en cuenta a la hora de construir. Se agrupan en los 5 apartados siguientes:
- Materiales de construcción e insonorización.
- Ambiente interior.
- Medioambiente, energía y agua.
- Interiorismo.
- Solar/Parcela
1. Materiales naturales.
Los materiales naturales, por el hecho de tener un origen natural, son los que menos dañan al planeta. No hay que fabricarlos, ya existen en la naturaleza. Un edificio por normativa, debería llevar junto al proyecto de diseño, un estudio de su construcción y mantenimiento de sus materiales, la razón principal del beneficio que aportan los materiales naturales, es que necesitan poca energía de transformación. Esto repercute en positivo a todo el proceso de ejecución.
El uso de materiales naturales en las casas ecológicas, ayudan a reducir el efecto invernadero.
2. Ambiente interior sano
El ambiente interior saludable de las casas ecológicas, está relacionado con el beneficio del punto anterior y por lo tanto conectado con la salud. El aire que respiramos en nuestras ciudades es vital que sea saludable, pero el de los interiores de los edificios es si cabe aun más importante, ya que pasamos muchas horas dentro de ellos.
A.- Humedad interior óptima
Dentro de los edificios, por las diferentes actividades que desarrollamos (respirar, cocinar, ducha, etc.), se crea vapor de agua y la humedad atmosférica interior va variando. El límite deseable de humedad interior estaría entre 40%-60%.
Si mantenemos una humedad óptima, estaremos también controlando las siguientes afecciones:
- Patologías y condensaciones que puedan surgir en una edificación.
- Reducción de la presencia de hongos, bacterias, polvo y alérgenos
B. Ventilación adecuada.
En el interior de las casas si no se ventila adecuadamente, pueden crearse concentraciones de CO2 que afectarán a nuestra salud, bienestar y rendimiento. La concentración de CO2 se mide en ppm (partes por millón). Lo recomendable en una estancia en la que se vaya a permanecer, es que no supere los 700ppm.
3. Casas Ecológicas.
Los materiales saludables son aquellos que no influyen negativamente en la salud de la persona que habite la casa, la mayoría de los materiales que son beneficiosos son de origen vegetal o animal. Estos no emiten tóxicos y están sin adulterar. Una de las cosas que debes tener un cuenta son las colas que se usan algunas veces en los materiales saludables. Por ejemplo para unir piezas de madera.
Los materiales saludables, también deben protegernos de los ruidos y vibraciones que existen al exterior o en el interior de la casa.
4. El confort en las Casas sanas
Cuando hablamos de casas ecológicas, a la par de la eficiencia energética, tendríamos que colocar el concepto de confort, ya que los usuarios lo valoran y se sorprenden positivamente. Muchas de las patologías que puede sufrir una edificación, se pueden prevenir y solucionar con un buen estudio y estrategia de los puntos que hemos tocado en este artículo.
El confort es una sensación de bienestar, que a veces es difícil de describir, pero que de seguro la habrás experimentado alguna vez, pero en realidad tiene una base física y depende de los parámetros del ambiente que nos rodea, como por ejemplo la humedad, la temperatura de las superficies, el aire interior, las corrientes de aire, etc.
Decimos que tenemos confort cuando conseguimos sentirnos bien con las siguientes sensaciones:
- Aire interior, filtrado, sin olores, aire limpio y continuo.
- Sensación térmico sin oscilaciones de temperatura.
- Control acústico, el ruido exterior queda amortiguado.
- Temperatura interior, sin corrientes de aire, temperatura superficial alta.
5. Bajo impacto ambiental
Antes de la industrialización, se construía con los materiales y recursos del lugar. No conocían otra manera de hacerlo y respetaban su entorno, deberíamos ponernos “en su cabeza” e intentar utilizar materiales y sistemas que no favorezcan la explotación abusiva de materias primas escasas o peligrosas.
Para conseguir que el impacto ambiental de un edificio sea mínimo, podemos tener en cuenta las siguientes pautas:
- Reducir los residuos. Controlando el proceso de construcción, podemos hacer un estudio y minimizar los residuos que se generen en la obra.
- Aprovechamiento de agua de lluvia y consumo responsable.
- Energías renovables y limpias. Si tenemos que utilizar energías, que seanbiocombustibles.
- Compensación de CO2
6. Ahorro energético
La eficiencia energética es uno de los beneficios más asumidos en las casas ecológicas. Digamos que desde la propia administración, una vez que vives en una casa pasiva, la diseñas y/o la construyes, no hay marcha atrás. Te será muy difícil volver a vivir en una casa que no sea de bajo consumo.
La clave de una casa pasiva es utilizar sistemas pasivos al máximo:
Diseño bioclimático + Orientación óptima + Captación solar
Una vez que hemos optimizado nuestra casa al máximo, nos daremos cuenta que la necesidad de sistemas activos se reduce al mínimo (instalaciones de calefacción /refrigeración, electricidad).
Es fundamental que los sistemas activos que utilicemos, sean de energías renovables y limpias.
Si tienes alguna duda sobre ventanas u otro tipo de carpinterías, ponte en contacto con nosotros, y te las resolveremos encantados.